La puerta de acceso “Carmel” al Park Güell ha sido completamente renovada

La seguridad es una prioridad absoluta, ya que aquí se mueven a mano unas 11 toneladas cada mañana y cada tarde

La puerta batiente de la entrada oeste al Park Güell, la Puerta del acceso de Carmel, estaba envejeciendo. La puerta se construyó de una sola pieza en 1992: 6 metros de ancho, entre 2,25 y 2,7 metros de alto y 45 cm de grosor. Consiste en una estructura de acero revestida exteriormente con un panel que parece mampostería de piedra, de modo que, cuando está cerrada, la puerta es prácticamente indistinguible del muro del parque. Se apoya únicamente sobre un eje de 250 mm de diámetro alrededor del cual gira. En origen no existía una rueda guía que sirviera de apoyo sobre el suelo ya que el terreno tiene una ligera inclinación.

La puerta solo se abría y cerraba una vez por día para controlar el acceso al parque, cuando no había tráfico público, y no incluía ningún dispositivo de seguridad. Sin embargo, los empleados que tenían que mover la puerta cada mañana y cada tarde tenían que aplicar mucha fuerza y mucha maña. El portón no debía acelerarse ni por el operario ni por corrientes de aire, porque no era posible controlar sus 11 toneladas de peso. Esto también causaba problemas en ocasiones, cuando la puerta golpeaba demasiado rápido contra el  marco al cerrar.

Se necesitaba urgentemente un dispositivo de frenado para adaptar la puerta a los requisitos de seguridad actuales.

A finales de 2022 se desmontó la puerta, lo que no era posible sin maquinaria pesada, y se trasladó al taller de reparación. La puerta se abrió longitudinalmente por la mitad y se desensamblaron las 3 partes de cada cara, originalmente atornilladas entre sí y soldadas. El eje sobre el que descansaba toda la carga tuvo que ser revisado y los cojinetes sustituidos. Adicionalmente se montó una rueda en el extremo de la puerta para que rodase sobre el terreno y fuera controlada por el dispositivo de amortiguación para frenarla.

Una parte importante de los trabajos de reparación consistió en instalar un sistema de amortiguación del movimiento de la puerta para que ésta no pudiera superar una determinada velocidad. DICTATOR lo solucionó mediante un complejo mecanismo que controla la rueda.

Los mayores retos para DICTATOR fueron:

• Había muy poco espacio disponible en el interior de la puerta.
• El terreno bajo la puerta está en pendiente. Esto significa que la rueda debe adaptarse a las diferentes alturas. Cuanto más se abre la puerta, más debe subir la rueda en su interior. Cuando se cierra, debe bajar lentamente con el terreno inclinado. La diferencia de altura total es de aprox. 70 mm.
• El sistema de frenado no debe estar activo en absoluto al empujar la puerta, ya que de lo contrario este esfuerzo se sumaría a la resistencia al movimiento de la propia puerta de 11 toneladas.
• Tiempo limitado para el diseño, desarrollo, pruebas, fabricación y montaje. No existían planos internos detallados de la puerta donde debía alojarse el freno por lo que no era posible diseñar el sistema de amortiguación hasta desmontar y desensamblar la puerta. El tiempo máximo disponible fue de 5 meses.

DICTATOR ha desarrollado una construcción especial de amortiguación para que la velocidad de la puerta se controle ahora de forma fiable sin requerir más fuerza manual para mover la puerta

DICTATOR Española tiene décadas de experiencia en la solución de requerimientos especiales para mover, automatizar o ralentizar puertas grandes y pesadas. La puerta del Park Güell suponía un reto especial, pero DICTATOR fue capaz de resolverlo en el poco tiempo disponible. La solución consistió en un freno de corrientes parásitas, que normalmente se utiliza en puertas correderas para controlar la velocidad en todo el recorrido. Se utilizaron múltiples relaciones de transmisión a la rueda de rodadura para garantizar que la fuerza del freno de corrientes parásitas apenas se notara al empujar la puerta. Toda la construcción se colocó en una carcasa especial que se desplaza vertical sobre raíles por el interior de la puerta. Esto permite que se adapte al nivel del terreno y que la rueda esté siempre en firme contacto con el suelo.

Se ha practicado una abertura de inspección en la carcasa exterior de la puerta, en la zona del dispositivo de freno, pero solo puede reconocerse si se mira muy de cerca. Como seguridad adicional, también se puede conectar y activar un freno de mano desarrollado para esta puerta, pero hasta la fecha no ha sido necesario, debido al excelente funcionamiento del control de velocidad.

Puerta de entrada “Acceso Carmel” en el Park Güell, tiene 6 m de ancho y entre 2,20 y 2,70 m de alto con un peso aprox. de 11 toneladas!

Estructura de la puerta abierta longitudinalmente. En la foto se observa el núcleo central formado por una chapa de acero de 25 mm de grosor. Al fondo se puede ver la posición del eje. El revestimiento, que desde fuera parece un muro de piedra, esta apoyado sobre el suelo y corresponde a la cara exterior de la puerta.

El revestimiento exterior se separó en 3 partes, originalmente atornilladas y soldadas, como parte de la revisión. En la foto, apoyada sobre el suelo, está la cara interior de la puerta.

Toda la estructura de amortiguación se puede mover vertical libremente en la puerta, de modo que las diferencias de nivel en el terreno no suponen ningún problema. La rueda siempre presiona firmemente contra el suelo.

La compleja unidad de amortiguación, aquí todavía en el taller. Muchos conocimientos especializados, pensamiento innovador y la determinación de encontrar una solución y las adecuadas posibilidades de fabricación fueron las condiciones previas para el éxito.

Aquí la puerta está cerrada y se confunde con el muro debido a la extraordinaria imitación a la piedra. Si se mira de cerca se puede apreciar la abertura habilitada como registro para revisión, en la foto todavía abierta, que oculta el dispositivo completo de amortiguación.