En este caso, este portón batiente preocupaba al propietario, porque la entrada que hay detrás tiene una pendiente del 14%. Por tanto, hubo que poner bisagras ascendentes en ambas hojas de la puerta para que pudiera abrirse. El resultado: al cerrarse, se mueve demasiado deprisa y se cierra con mucho ruido. No hay que subestimar el riesgo de accidentes, además de causar reparaciones y costes de mantenimiento más frecuentes para la puerta y sus herrajes.
El cliente buscó una solución. Un accionamiento eléctrico para la puerta quedaba descartado. DICTATOR ofrece una solución fiable, mecánica, que no necesita electricidad y además es fácil de instalar: el amortiguador de montaje fijo diseñado especialmente para portones batientes con bisagras ascendentes. Se fija a la puerta y al marco y frena la hoja de la puerta al cerrar con velocidad regulable de forma individual, de modo que la puerta se cierra lentamente. El amortiguador está equipado con un tubo protector adicional que evita la acumulación de suciedad y, por tanto, daños en el vástago. El amortiguador funciona en una sola dirección, es decir, al cerrar, por lo que apenas es necesario aplicar fuerza al abrir.
El montaje también es sencillo, ya que en DICTATOR calculamos gratuitamente para nuestros clientes los puntos de fijación exactos para cada aplicación y, en caso necesario, ofrecemos también los herrajes de montaje. En este caso, el cliente quería fijar el amortiguador directamente a la pared, un deseo que por supuesto tuvimos en cuenta al calcular las posiciones de montaje – porque nos tomamos en serio nuestro lema “Estamos aquí para ayudar” y nos alegramos de cada solución que funciona bien y de cada cliente satisfecho.