Cálculo de pistones de gas – Problemas y errores a evitar
¿Qué puede pasar con un cálculo incorrecto de pistones de gas?
En Internet, muchas páginas ofrecen herramientas para calcular pistones de gas. Lo que parece fácil en teoría puede crear muchos problemas en la práctica. Esto se debe a que hay que tener en cuenta muchos parámetros diferentes en el cálculo de un pistones de gas, e incluso ligeras desviaciones pueden hacer que el pistón de gas no funcione correctamente o incluso suponga un riesgo para la seguridad.
Los siguientes ejemplos muestran lo que puede salir mal cuando los pistones de gas se calculan de forma incorrecta.
La solapa del mostrador del contador se cierra de golpe a pesar del pistón de gas
La solapa debería permanecer abierta y no golpear al cerrarse
Para facilitar la apertura de la solapa, se instaló un pistón de gas de otro fabricante. Desgraciadamente, esto solo resolvió una parte del problema. El cliente se puso en contacto con nosotros con la siguiente descripción del problema: “Es posible abrir la solapa con el pistón de gas. Sin embargo, la solapa cae de golpe a partir de un ángulo de aproximadamente 35°, por lo que el riesgo de lesiones es considerable“.
Otro problema: la solapa no quedaba sujeta en posición abierta, sino que volvía a cerrarse un poco, lo que dificultaba el paso de personas.
En este ejemplo, hubo que tirar el pistón de gas instalado anteriormente. El cliente tuvo que pagar dos veces, y para el medio ambiente tampoco es una solución sostenible.
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Más información
Pistón de gas deformado
Riesgo de que los pistones de gas se deformen: carrera demasiado larga con un diámetro demasiado pequeño
¿Le gustaría tener una obra de arte moderna? ¿Qué le parece el modelo ” pistón de gas acodado”?
¿Qué es lo que ha fallado en este pistón de gas? El diámetro del vástago y del cilindro eran demasiado pequeños para esta aplicación con una carrera relativamente larga. Esto, combinado con la alta presión correspondiente, puede hacer que el vástago se doble rápidamente.
Si realmente no es posible seleccionar un pistón de gas de una serie de mayor diámetro, entonces el vástago del pistón debe disponer necesariamente de una guía.
Una carrera demasiado larga a una presión demasiado alta y un diámetro de vástago y cilindro demasiado pequeños: y la obra de arte está terminada.
Trampilla de suelo abre a toda velocidad y arranca pistones de gas
Los pistones de gas no deben utilizarse como topes finales, y mucho menos si el pistón de gas se extiende sin amortiguación
En este ejemplo confluyeron dos factores:
- Se utilizaron pistones de gas con amortiguación tipo 0, es decir, el vástago se extiende completamente sin frenar. Si hubiera habido un tope, la trampilla habría chocado con toda su fuerza y posiblemente lo habría doblado.
- En este caso, sin embargo, tampoco había un tope mecánico, por lo que el pistón de gas abría la tapa a toda velocidad.
La inercia de la tapa hizo que se abriera más de lo que permite el recorrido de los pistones de gas. La combinación de la falta de control de la velocidad de apertura y la ausencia de un tope final dio lugar a fuerzas tan elevadas que el vástago de los resortes de gas se arrancó de los cilindros después de tan solo pocos ciclos.
Así que no es solo cuestión de calcular las fuerzas. La posición de instalación y el conocimiento de otras capacidades de un pistón de gas también son necesarios para un cálculo correcto. Solo así un pistón de gas será una ayuda fiable y duradera con un funcionamiento perfecto.
Ahorrar en pistones de gas para esta gran cubierta causa deformaciones en ella
Trampillas grandes y anchas: en términos de fuerza, un pistón de gas podría ser suficiente, pero eso es recortar gastos en el lugar equivocado
Un solo pistón de gas puede abrir y mantener abierta una trampilla con una longitud de 1.450 mm, una anchura de 3.000 mm y un peso de aproximadamente 100 kg.
PERO:
El buen funcionamiento también implica que la trampilla se cierre completamente. Especialmente si están situadas en el suelo, esto es aún más importante, ya que de lo contrario suponen un peligro de tropiezo.
¿Por qué un solo pistón de gas puede hacer que la trampilla se quede un poco abierta en un punto determinado?
Si el pistón de gas de una trampilla grande solo presiona en un lado, la trampilla puede deformarse con el tiempo, lo que también podría afectar a las bisagras. Y en el punto en el que el pistón de gas está fijado, la trampilla se queda entonces ligeramente abierta.
En DICTATOR sabemos estimar muy bien a partir de qué dimensiones es absolutamente necesario utilizar dos pistones de gas y en qué casos un solo pistón de gas sigue siendo suficiente para conseguir el resultado deseado.
Otros ejemplos
A menudo ocurre que el diseño de una trampilla tiene que modificarse. En este caso, el peso y la longitud de la trampilla cambiaron cuando ya se habían encargado y suministrado los pistones de gas.
Los pistones de gas para la trampilla planeada inicialmente se calcularon para poder mantenerla tanto cerrada como abierta, y para que pudiera ser manejada cómodamente por una sola persona.
¿Qué habría pasado si los pistones a gas se hubieran instalado en los puntos calculados inicialmente a pesar del cambio de peso y dimensiones de la trampilla?
Si, después de cambiar el peso de la trampilla, los pistones a gas se hubieran fijado en las posiciones de instalación determinadas en el primer cálculo, la trampilla no se mantendría cerrada. Incluso al presionar hasta la posición de cierre con fuerza manual (muy alta), volvería a rebotar inmediatamente con una fuerza de 141 N tras soltarla.
¿Qué hacer ahora? Tirar los pistones de gas sería un costoso desperdicio de material y recursos, lo que no estaría en consonancia con las ideas de sostenibilidad de DICTATOR.
Así que DICTATOR revisó el cálculo original (¡gratis!) teniendo en cuenta los pistones de gas ya suministrados y calculó nuevos puntos de fijación, algunos de los cuales diferían considerablemente de los originales.
Esto no solo permitió al cliente utilizar los pistones de gas ya comprados, sino que también le evitó tener que tantear laboriosamente para encontrar los puntos de fijación correctos por prueba y error, lo que habría llevado mucho tiempo y podría haber supuesto muchos agujeros en el perfil de la trampilla.
Tras cambiar el tamaño y el peso de la solapa, fue posible recalcular los puntos de fijación para poder seguir utilizando los pistones de gas ya adquiridos.
Tras cambiar el tamaño y el peso de la solapa, fue posible recalcular los puntos de fijación para poder seguir utilizando los pistones de gas ya adquiridos.
