Solo los cierrapuertas de suelo WAB 180 pueden cerrar las cuatro puertas pivotantes.
Satisfacen igualmente las exigencias arquitectónicas (pasillo rodeando un jardín sin molestos marcos de puerta) y las exigencias de protección contra incendios (puertas que cierran de forma completamente hermética)
El nombre da una impresión un poco errónea: el “Crematorium Haarlemmermeer” cerca de Amsterdam (Países Bajos) es principalmente un lugar para despedirse. La arquitectura ayuda a la gente en un momento tan doloroso con tranquilidad, mucha luz y la posibilidad de dejar vagar la mirada a lo lejos.
Pero también estos edificios deben cumplir ciertas exigencias de seguridad. El pasillo dentro del edificio que rodea el jardín en el patio interior debe dividirse en cuatro secciones cortafuegos mediante cuatro puertas. Cuatro puertas de madera de una altura de 2.700 mm y una anchura de 2.116 o de 2.273 mm cumplen con esta tarea. Pesan más de 160 kg. Su peculiaridad: ningún marco de puerta debía dificultar el paso y perturbar el espacio abierto. Por eso, las puertas tienen un eje desplazado, en posición excéntrica y, de esta manera, cierran absolutamente a ras de la pared. No queda ningún resquicio.
El cierrapuertas aéreo previsto inicialmente no era capaz de hacer frente a esta tarea. Pero el cierrapuertas de suelo WAB 180 con su gran capacidad de carga y su fuerza ahora cierra las puertas de manera segura y fiable – y casi no se ve.